lunes, 14 de noviembre de 2016

El Gorila que quería ser humano

     









El gorila que quería ser humano

Por: Leida Esteva es Goteva
noviembre 14 2016


            Estaba lloviendo como casi todos los días.  En la selva el clima es muy húmedo. Una manada de gorilas se paseaba de un lado a otro de la gran selva amazónica buscando qué comer y jugando entre sí.  Todos llevaban una misión que completar en el día que comenzaba.  Las hembras llevaban a sus hijos en brazos, los acariciaban quitando sus pulgas y los amamantaban cuando era necesario hacerlo.  Los machos iban al frente siguiendo al macho alfa de la manada seguros de que su líder los conduciría por sendas seguras y encontraría comida para alimentar a su manada y, al final del día, designaría un lugar seco y protegido para pasar la noche. Los jóvenes gorilas jugaban sin cesar unos con otros.  Se perseguían, se empujaban, rodaban por el suelo repleto de hojas y tierra fresca.  En verdad que la pasaban de maravilla. Todos tenían una labor que hacer y todos sabían cómo hacerla.

            Un joven gorila que recién salía de los brazos de su madre, tenía un sueño.  Nuestro joven gorila se llamaba Colo y era muy listo. !Su sueño era convertirse en humano! Había escuchado decir en las historias nocturnas de su manada, que una parte de los humanos creían que habían evolucionado de los primos monos y eso le dio la idea de que sería posible convertirse en humano se así lo quisiera.  Su madre Cala, lo escuchó con atención ante su petición tan sorpresiva y de inmediato se propuso preparar a su hijo ante semejante hazaña.
-Bien, Colo, si quieres convertirte en humano, primero debes conocer perfectamente lo que significa ser una persona.  Debes conocer su forma de vivir para que puedas escoger la clase de humano que deseas ser el resto de tu vida.- Le dijo la madre al joven gorila.

-!Escoger! No sabía que podía escoger un tipo de persona. -Le contestó el chico muy sorprendido.
-La vida de los humanos gira alrededor de decisiones, hijo.  Todos deben escoger la forma en que vivirán, en lo que creerán, en la forma de ser como personas y lo demás...todo es una decisión que deben tomar.-Le dijo la sabia madre gorila.

            Ya que Colo había entendido el concepto de "decidir", se dirigió junto a su madre al centro de la selva donde estaba la gran cascada mágica del conocimiento.  Detrás de la cascada se podía ver en el reflejo de sus aguas el mundo de los humanos en pasado, presente y futuro.  Colo y su madre se sentaron en el interior de la cueva y comenzaron a pedirle a las aguas lo que deseaban ver. Lo primero que Colo quiso ser era un poderoso rey. De pronto en las aguas de la cascada aparece un grandioso rey que estaba en medio de una sangrienta guerra. Habían cuerpos a su alrededor y la sangre parecía un mar rojo.

-¿Qué pasa madre?-Preguntó horrorizado.
-Es que los reyes humanos deben enfrentar muchas guerras y matar a muchas personas para arrebatarles sus tierra.  Esa es la forma en que se vuelven poderosos. No es algo que se le imponga, es una decisión que tomó para hacerse poderoso más rápido.-Le dijo la madre un poco angustiada.
Colo se sintió decepcionado con la idea de ser un rey humano y de inmediato cambió de opinión.
-No, madre. Nuestro líder no tiene que matar a nadie para ser poderoso.  Todos lo respetamos porque nos protege y nos alimenta.  Sabemos que debe ser respetado. Ahora quiero ser hombre muy rico. Así seré poderoso rápidamente sin tener que matar a nadie. Le dijo Colo entusiasmado.

            Las aguas cambiaron de colores y enseguida apareció un hombre muy rico en su gran mansión rodeado de piezas de arte hermosas y muy costosas.  Lámparas en los techos de cristal fino y muebles de madera de roble. Se escuchaban ruidosos estruendos fuera de la casa porque un centenar de policías le disparaban a la residencia.  Los hombres que cuidaban la mansión contestaban de igual forma y personas caían muertas alrededor. Nuevamente Colo abrió sus ojos espantado de lo que veían.

-Madre, ahora qué pasa.  Porqué hay tanta gente muriendo en esta ocasión. Preguntó el joven gorila.
-Es que ese hombre se hizo rico muy rápidamente por la venta de  drogas que le hacen mucho daño a las personas.  Esa es una práctica ilegal, pero de igual forma decidió hacerse rico de esa manera para adquirir poder de forma rápida. -Le dijo cala a su hijo.
-No,no, yo no quiero hacerle daño a las personas que serán mis iguales.  Nosotros nos apoyamos unos a otros y todos nos respetamos sin tener que dañarnos.- Luego de pensar un poco cabizbajo, continuó diciendo.- Entonces. ¿Los humanos son poderosos porque han hecho mucho daño a los demás de su especie?- Le pregunta a su madre.
-No, hijo.  Los hombres más poderosos y respetados del mundo humano son personas que han tenido que esperar muchos años para convertirse en personas poderosas y respetadas. Han estudiado mucho para adquirir conocimiento. Han practicado la caridad con sus semejantes y han trabajado arduamente. -Le dice la madre a Colo.

-Bueno...yo quiero ser respetado por todos y quiero sentirme con poder.  ¿Eso quiere decir que si me vuelvo humano debo esperar mucho tiempo, ¿verdad?- Le dijo.
-Sí, pero solo así, puedes ser lo que desees ser sin hacerle daño a nadie.- Le contesta la madre. -Y lo más importante es que serás un hombre amado y admirado por todos tus semejantes porque lo lograrás haciendo bien a muchas personas.-Le dijo Cala a su joven hijo.
Colo estaba pensativo y triste porque veía sus sueños derrumbarse.  Creía que teniendo poder se sentiría más feliz de lo que ya era con su manada. De pronto las aguas cambiaron nuevamente de color y apareció la imagen de un hombre alto y delgado con barba y pelo largo.  Vestía una bata a media pierna y su cintura la ceñía con una sencilla cuerda. Colo lo miraba con curiosidad porque miles de personas lo escuchaban hablando. De inmediato le pregunta a su madre por el misterioso hombre.

-Ese hombre que ves vivió en la tierra hace 2,000 años y ha sido el hombre más influyente y poderoso que jamás ha existido.  Todavía las personas lo adoran y lo aman a pesar de que ya no está aquí físicamente. - Le dijo Cala a su hijo.
-Pero está pobremente vestido y no luce como un hombre rico.- Le dijo asombrado.
-Era el hombre más rico del planeta porque poseían el tesoro más poderoso de todos los tesoros de la Tierra...Poseían amor por todas las personas.  Él solo quería hacer el bien y curar a todos de sus enfermedades.  Sus palabras eran un manantial de agua pura y sabiduría.  Sus actos han sido los más imitados en la historia de la humanidad. Él también tuvo que esperar para hacerse tan famoso. No fue hasta que cumplió 30 años que su vida comenzó a manifestarse.-Le dijo Cala a su pequeño.

- !Vaya! !Que historia! Madre perdona el mucho tiempo que te he tomado.  Al fin he comprendido, que el poder y el respeto no tiene que ver con ser rey de una nación o poseer mucho dinero.  Ahora sé que el respeto se gana con el amor por los demás semejantes y la ayuda que podamos ofrecerle.  Solo así se ganará el poder de influir positivamente en los demás. Sabes, creo que puedo ser un gorila toda mi vida y ser muy feliz.  Los humanos parecen muy complicados para lograr lo que desean.  Yo sé exactamente por qué estoy aquí y lo que debo hacer cada día.  Ya me siento muy poderoso porque he decidido lo que quiero hacer para ser feliz.  !Gracias madre!

            Cala y su hijo se fueron de la cueva y se unieron a su manada para continuar con el resto del día.  Colo se unió a sus parientes de la misma edad y jugaron y brincaron por los árboles e hicieron sus tareas en bienestar de todos sus semejantes sin preocupaciones mayores. En la noche construyeron sus nidos y se dispusieron a dormir.  Colo cerraba sus ojos satisfecho por todo lo que había aprendido durante el día y ya tenía mucha paz en su corazón de gorila.

Fin.



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